viernes, 20 de marzo de 2009

TIERRA DEL FUEGO - LAGUNA ESMERALDA

TIERRA DEL FUEGO-LAGUNA ESMERALDA


En el verano del 2007, decidimos hacer un viaje a Tierra del Fuego.

Antes de partir chequeamos en internet los trekking que podíamos hacer cerca de la ciudad de Usuaria; donde nos alojaríamos.

Hay una infinidad de cosas interesantes que se pueden conocer en el fin del mundo, pero en esta nota me voy a referir al trekking de la laguna esmeralda.

Partimos de la hostería en una combi, que nos translado por la ruta 3, en dirección este. Pasamos por el centro de esquí Cerro Castor (cuyos medios de elevación pasan por arriba de la ruta 3), y en media hora más estábamos en la entrada de un refugio de montaña muy pintoresco, donde en invierno realizan paseos con trineos tirados por perros, por las sendas de los bosques fueguinos.

En el lugar tienen un criadero de perros husky, hay un amplio restaurant y una buena salamandra.



La dueña cobra una pequeña suma en concepto de entrada a la propiedad, ya que es privada. Con este pago nos entregó un mapa, donde nos indicaba el recorrido a seguir para encontrar la laguna y el tiempo de duración (1 hs y media de ida).

Como siempre pasa en Tierra del Fuego, el día se presentaba con una molesta llovizna, pero partimos igual con la esperanza de que aclare un poco para poder observar el paisaje.

Seguimos un sendero bien marcado, que nos ayudaría a franquear el primer bosque. Los árboles tienen marcas azules para no perderse. Una ves que se sale del bosque, nos encontramos con un bajo o mallín de turba, donde se hace muy difícil ver la senda (practicamente no la hay), y nos tendremos que orientar teniendo en cuenta que se debe caminar paralelamente al río, hasta ubicar la entrada al segundo bosque. Esta entrada esta marcada en azul en un árbol, pero antes hay que vadear un pequeño arroyo. Nos ayudará mucho observar las huellas de otros caminantes.

Una ves localizada la entrada, comenzamos nuevamente la caminata por el segundo bosque. La lluvia no paraba y el terreno estaba muy resbaladizo. Hay que tener mucho cuidado con las raíces de los árboles parecen lustradas y se tornan un problema; ya que tendremos que mirar continuamente el piso para no tropezarnos.


Al final nos encontramos con otro mallín de turba que nos hacia muy difícil la caminata, ya que nuestros borsegos no aguantaron el agua y se enterraban completamente en ese terreno, que a modo de esponja nos empapaba toda la ropa.

En un momento ya fastidiado de tanto andar y de la lluvia tropiezo con una raíz y caigo. Demás esta decir que quedé todo mojado. En ese instante pensé en volver, pero mi esposa me dio el ánimo que me faltaba para seguir. Por delante tenia una pequeña morena de menos de diez metros; y la encaramos para ver lo que había detrás.








Sorpresa... apareció la gran laguna. Nos olvidamos de todo el cansancio, la mojadura y quedamos mudos al ver tanta belleza. Es una esmeralda, que como una joya esta engarzada en lo verde del bosque. A la izquierda estaba una pequeña cascada que desagotaba el espejo de agua y formaba el nacimiento del río que habíamos remontado.









A la derecha se forma una espléndida playa de arena volcánica rodeada de bosques nativos.

Y al fondo, a lo lejos se puede observar el glaciar ojo del overo, que es otro objetivo, para realizar un trekking. Repuestos de tanta naturaleza, comenzamos a sacar unas fotos para el recuerdo.



Una vez en el refugio, disfrutamos de un rico café, sentados cerca de la salamandra, esperando que la ropa se secara, y comentando lo que habiamos conocido.

Después de todo... estabamos en el fin del mundo.

Eduardo
abril 2009

domingo, 15 de marzo de 2009

UNA OPINION : DR. FRANCISCO PASCACIO MORENO

OPINION

Hace ya algún tiempo leí una nota de la revista lugares, que resumía la vida del Perito, o Panchito. Tal el apodo que le daba su padre en sus tantas cartas que le escribió. Si bien no es de mi agrado, ni el objetivo de este blog copiar notas, en este caso me parece un deber hacer conocer por este medio la vida del principal procer de nuestra querida Patagonia; y así tratar de llegar a difundir el sentimiento de éste argentino que dedicó su vida al estudio de la región. Y ahora mas que nunca...cuando en estos tiempos existen algunos individuos que están en contra de todos los que hicieron grande a este país, (llamese generación del ochenta... Roca, Bustillo, Ramos Mejia, etc. ..etc.. y un sin fin de personajes más que fomentaron el progreso ).


Esta ola de pensamiento, (por suerte minoritario), de algunos sectores, que no se, que fines políticos persiguen, pretenden derribar bustos de gente que nos marcó un ejemplo y un camino a seguir. Critican, como si fuera un crimen que hayan seguido ejemplos y modelos de los países mas adelantados (en esa época europeos). Yo me pregunto: ¿que modelos tenían que seguir?.

Como si quisieran ganar a las nuevas generaciones, y cambiarles la cabeza, imprimiéndoles un pensamiento alejado de estos antepasados, que marcaron una época en que nuestro país ocupaba el séptimo lugar en el mundo, presentan a la sociedad proyectos poco relevantes, vulgares y de niveles incomprensibles, que nos pone a la altura de lo que somos en la actualidad... un país que perdió el liderazgo que tenia en esa época.

Recuerda el lector el proyecto de cambiar el billete de cien pesos donde esta la foto del Gral. Roca, porque decían que era un genocida, (comparándolo con los militares del golpe del 76).

Observe el lector, como recibió el país el centenario... las obras realizadas están. Refiriéndome solo a la Patagonia : El ferrocarril, las rutas, los parques nacionales, todas las construcciones de Bariloche, el desarrollo del turismo, la consolidación de nuestras fronteras, etc. . etc.

Veremos ahora como va a recibir el país el bicentenario. ¿Terminarán de asfaltar la histórica ruta 40, que une todo el oeste patagónico?. NO SE!.

Como ve el lector, hay cosas materiales que no se pueden borrar con la crítica infundada, sacando a flor de piel no se que pensamiento retrogrado, y queriendo confundir a la gente llevándola, o arreándola como ganado.

Por suerte hay mucha juventud que viaja, estudia e investiga por toda nuestra Patagonia.


Este efímero y minúsculo movimiento pasará sin dejar rastro, como un chubasco del oeste patagónico, y los que piensan así serán ilustres olvidados, porque en sus vidas hablaron y criticaron mas de lo que hicieron.

Yo no quería escribir todo esto... pero aburrido y no teniendo nada que hacer en este domingo 15 de marzo de 2009, la pluma se desboldó...mis disculpas, y aquí esta esa nota :



Revista LUGARES Nro. 95Pag. 12-14

Por: Maria Malusardi
Fotos: Archivo Lugares




"No es privilegio de pocos sentir fascinación por el sur argentino. Ni siquiera es una originalidad. Pero sí es privilegio de pocos o de casi nadie descubrir, clasificar y fundar; haber pisado esas tierras cuando aún nadie lo había hecho, cuando eran geografías indígenas y misteriosas, vírgenes y salvajes. Francisco Pascasio Moreno, que nació en Buenos Aires en 1852, fue ese hombre incauto y minucioso en sus ademanes, que se adentró en las tierras ya recorridas por Darwin algunas, otras por nadie.Francisco Moreno vivió intensamente durante toda la segunda mitad del siglo XIX momento de explosión histórica en la Argentina, y principios del XX, pleno positivismo en el mundo: la única perspectiva posible sobre la vida estaba concentrada en los alcances de la ciencia. Pero él, que fue un naturalista, un científico, un viajero, un inquisidor de la vida y sus orígenes y un autodidacta, llegó hasta las tierras más australes para percibirlas, palparlas y nombrarlas, no con la vena atomicista y arbitraria de las tendencias del momento, sino con una visión más integradora.Así fue que apenas pisó las márgenes del lago Nahuel Huapi, clavó una bandera argentina a modo de posesión simbólica. Luego descubrió y nombró el lago Argentino, también el cerro Moyano y el Fitz Roy, entre otros sitios. Sus exploraciones geográficas y geológicas fueron permanentes e interminables a lo largo de su vida. Iba y venía, en tren, en diligencia, a caballo, en barco.
De todo medio de transporte menos aviones porque entonces no existían se valió el perito Moreno para arribar a los confines del planeta, para descubrir especies nuevas y clasificarlas, para convivir con los aborígenes, hablar sus lenguas, paladear sus alimentos, dormir sobre sus cueros pintados y sus tejidos, revisar sus cementerios y sus calaveras, sus utensilios y sus lanzas.Su intensidad en la relación con los indios, incluso, fue curiosa: pasó desde el amor hasta el cautiverio. De todo salió indemne y muchas de sus experiencias pudo transformarlas en conocimiento.Ya de pequeño se quedaba horas colgado del movimiento de las hormigas y de las copas de los árboles. En el mirador de su propia casa, con incentivo de su padre, él y sus hermanos fundaron el museo Moreno. Esto, que podría haber quedado en un juego de niños inquietos, terminó trasladándose a su vida adulta: realizó una labor intensa como director del Museo de La Plata, le donó su propia biblioteca y envió a la Patagonia una nueva expedición científica. Entre tanto, las instituciones académicas de arqueología, geografía y ciencias del mundo le otorgaban títulos, nombramientos y demás honores.Murió en 1919. Poco tiempo antes había fundado el Parque Nacional del Sur, el primero de la Argentina, que hoy le rinde tributo portando su nombre en otros Parques, localidades, pueblos y hasta el más importante de sus glaciares.
Autor de numerosos escritos, publicó su Viaje a la Patagonia Austral (1876-1877) en la editorial de La Nación en 1879, ilustrado con algunos de los siguientes grabados.

FRAGMENTOS DE VIAJE A LA PATAGONIA AUSTRAL, DE F. MORENO

Guanacos...

La hembra pare sólo un guanaco (sic), aunque hay ejemplos de que se vea una con dos o tres; los pequeños, los que más prefiere el indio pues de ellos saca los cueros para los quiIlangos, son muy ligeros desde que nacen y ya a los dos meses es difícil tomarlos...







Los indios...
Se cree vulgarmente que para la población de Patagonia es necesario la extinción del indio Si éste en su orgullo de salvaje no pide a la tierra lo que ella voluntariamente no le proporciona, es porque desprecia la vida sedentaria y prefiere ceder a la atracción que en su cerebro ejercen los horizontes ilimitados del desierto..... El día que el tehuelche, así como las demás tribus de la pampa, conozcan nuestra civilización antes que nuestros vicios y sean tratados como nuestros semejantes, los tendremos trabajando en las estancias del Gallegos, haciendo el mismo servicio que nuestros gauchos.
Monte Frías ...

Costeamos la falda de un cerro bastante elevado y extenso, aislado, de formación arcillo-esquistosa, cuyo pie baña el lago. Llamo a este cerro "monte Félix Frías" en honor de mi venerable amigo, el esclarecido patriota que defiende con tanto ardor la causa de los argentinos contra las temerarias pretensiones chilenas....
Tormenta en el Lago Argentino

Hemos embicado al pie de los médanos, sobre una playa de pedregullo sumamente pendiente que pone en serio peligro la embarcación, que se encuentra rodeada por un furioso oleaje. Con inmenso y peligroso trabajo, maltratados por las piedras rodadas que nos golpean las espaldas, conseguimos salvarla descargándola, habiendo perdido el timón y el palo pintado y una gran parte de las colecciones que el agua arrebata. Los víveres están casi completamente inutilizados, sólo la momia se ha salvado preservada por un espeso sudario de lona con el cual la he envuelto."

Eduardo
Marzo 2009

lunes, 2 de marzo de 2009

SANTA CRUZ - CUEVA DE LAS MANOS

MINI TREKKING A CUEVA DE LAS MANOS



Luego de un viaje de todo un día por la famosa ruta 40, llegamos a un simpático pueblo de la estepa patagónica llamado Perito Moreno. Este lugar queda cerca de Los Antiguos, cuyas costas bañan el Lago Buenos Aires.


Previamente habíamos reservado la excursión a Cueva de las Manos, vía Internet con Claudio, que es el titular de Zoyen Turismo, y comodidades en el camping municipal


Poca gente conoce que en una pequeña placita de esta localidad se encuentra la lancha Pallavicini.

Yo la tenia que visitar. Lamentablemente, esta a la intemperie y al alcance de cualquier persona . Podemos decir que no esta bien mantenida. Tendría que estar en un museo, ya que es el único referente histórico de esa octava comisión de límites que comanda por el Dr. Francisco P. Moreno navego el Lago Buenos Aires.



















Al otro día partimos a Cueva de las Manos con un grupo de gente muy divertida, y nuestro guia,

Claudio, que resultó ser muy amable.


Después de recorrer la ruta que se abre camino en la estepa, llegamos a la entrada de la estancia El Toro. Hay una confitería muy moderna donde encontramos sanitarios. En este lugar nos cobran una entrada o canon; ya que las cuevas están dentro de la propiedad de esta estancia. Las mismas fueron declaradas patrimonio de la humanidad por la UNESCO.

Decidimos conocer las cuevas por el camino mas largo, que incluía un trekking para bajar la quebrada del Río Pinturas, observar los paisajes que nos regalaba el río, juntamente con el frente de los aleros de aproximadamente quinientos metros, que conforman esa maravilla.


Primeramente se tiene una vista lejana de la orilla opuesta a la que estábamos descendiendo, apreciándose la magnitud de la región a recorrer. Cuando se llega al río se lo cruza por un puente muy rudimentario, y se comienza la trepada de la otra orilla.





Nos toco un día de mucho calor y llegamos a la entrada de las cuevas fatigados y con sed.


Existe la opción de contratar la excursión mas corta, sin trekking. En este caso la camioneta nos deja en la entrada donde estábamos ahora tomando un refrigerio, que gentilmente nos había preparado Claudio.


Una vez en este lugar se abona la entrada oficial y se organizan los grupos que van a caminar por los aleros junto a un guia especializado.


Empezamos a caminar junto a otra gente (la mayoría extranjera), por las pasarelas. Es difícil narrar lo que sentí al ver la gran cantidad de manos plasmadas en la roca, que tienen miles de años. En pocas palabras el mensaje que me trasmitió el estar observando eso fue: "nosotros hemos vivido aquí, fue nuestro lugar, así cazábamos, así nos organizamos, estos fueron nuestros dioses, estos nuestros miedos, así se reproducen los guanacos, estas son nuestras armas, estos eran nuestros líderes" y muchos significados mas. Tal, como si fuera un inmenso cuento de ellos mismos, que quisieron plasmar para que generaciones futuras lo conocieran. Yo pienso que lo lograron.



















A modo de ejemplo muestro estas fotos. Obseven como aprovechando las imperfecciones de la roca, logran realizar un esquema del campo donde realizaban una de las tantas cacerías de guanacos. Se pueden ver los nativos y sus movimientos representados por unas lineas de punto o mejor dicho sus huellas, las armas, el rodeo de los animales aprovechando una quebrada, para acorralarlos y así lancearlos. La otra foto es en la actualidad la ladera del frente del río Pinturas donde se cree se inspiró, o porque no, se realizó la cacería alguna vez.





Como estas hay montones de escenas.


Terminada la recorrida el guia se despidió, pero nosotras seguimos con Claudio, por el faldeo de la montaña sacando estupendas fotos. Bajamos y vadeamos el río Pinturas para subir nuevamente la ladera opuesta. Con calor y esfuerzo conseguimos llegar a un manantial, donde bebimos y nos repusimos. Luego de otra pequeña caminata alcanzamos la camioneta.


Solo faltaba una cosa, para terminar el día. La propuso un simpático mendocino que nos acompañaba. Organizar un asado de cordero patagónico, Tema en el que Claudio fue cómplice.








Eduardo

20 de enero del 2009.



Dedico este relato, a todos los compañeros de ruta que me acompañaron ese día en que fui feliz, y que... a lo mejor, los encuentre en otro lugar y en otro tiempo.